ELÍAS VALIÑA SAMPEDRO
Elías Valiña Sampedro nace en Lier, en el municipio de Sarria (Lugo), el 2 de febrero de 1929 y muere en diciembre de 1989. A los 12 años ingresa en el Seminario de Lugo, donde continúa hasta acabar los Estudios Eclesiásticos en 1953.
Para completar y ampliar su formación se matricula, en 1957, en la Facultad de Derecho Canónico de la Universidad Pontificia de Comillas. Superados con éxito los dos cursos (con cuatro matrículas, siete sobresalientes y un notable) se licencia en 1959.
En este mismo año se presenta a los exámenes de traducción y lengua francesa en el "Institut Catholique" de Paris y obtiene los dos diplomas.
Finalizada esta etapa formativa, es nombrado párroco de O Cebreiro inmediatamente, el 22 de septiembre de 1959, con el anejo de San Antonio de Pedrafita. Desde entonces, el "cura do Cebreiro" dedicará toda su vida a esta comarca, de la que saldrá en contadas ocasiones. Parte del año 1960 lo pasó en Buenos Aires, "por razones de apostolado y otros asuntos afines". Las demás ausencias estuvieron motivadas por razones de estudio e investigación, la mayoría de ellas relacionadas con el Camino de Santiago.
En los años 1961 y 1962 realiza los cursos de doctorado en la Universidad Pontificia de Salamanca, elaborando una tesis sobre "El Camino de Santiago. Estudio histórico-jurírico" y defendiéndola en esta Universidad el 5 de mayo de 1965.
Elías Valiña fue de lugar en lugar, de Iglesia en Iglesia, por las Universidades europeas, por los foros internacionales... predicando el buen ser de su patria y hablando de la comarca de O Cebreiro, así como de la importancia del Camino de Santiago para la unión europea.
En 1984 emprendió la señalización del Camino de Santiago, con flechas amarillas, desde Francia hasta Compostela. En el trayecto gallego realizó varios trabajos de limpieza, recuperación de tramos perdidos, enumeración kilométrica, etc. Hoy se consideran su trabajo de señalización como la delimitación más segura de los tramos originales de la ruta jacobea. Por todo esto puede decirse, sin duda, que D. Elías fue el más importante conservador y promotor del Camino de Santiago como ruta de peregrinación y turismo. De ahí que fuese nombrado por unanimidad comisario del Camino de Santiago durante el I Encuentro Jacobeo celebrado en Compostela en 1985. Inicia entonces la publicación del Boletín del Camino de Santiago, con la finalidad de promover la creación de asociaciones de Amigos del Camino de Santiago, que velarán por la conservación de sus respectivas parcelas a lo largo de la ruta.
Pero su interés por el Camino de Santiago no hizo que descuidara su labor en la comarca de O Cebreiro; al contrario, fue uno de los que más luchó para favorecer el desarrollo económico y cultural de esta zona de la montaña lucense. Nada más hacerse cargo de la parroquia de "O Cebreiro" inició las gestiones para conseguir la restauración de la iglesia, la hospedería y el poblado, en peligro de extinción. La Dirección General de Arquitectura se encarga de elaborar un proyecto de restauración de O Cebreiro y el 7 de abril de 1962 recibe de Francisco Pons-Sorolla y Arnau los planos y el proyecto, iniciándose las obras inmediatamente. El 30 de agosto de 1964 el Santuario ya está restaurado y se procede a la consagración de la Iglesia. Las obras continúan con el poblado: a los vecinos se les dota de casas nuevas y sus viviendas, las pallozas se rehabilitan y pasan a depender de la Dirección General de Bellas Artes. En 1971 se inauguró un Museo Etnográfico con sede en las pallozas.
Domingo García fue un hombre nacido en Viloria de Rioja en 1019 que gracias a su entusiasmo y fervor religioso se convirtió en uno de los mayores impulsores del Camino de Santiago.
Después de negársele su admisión en el Monasterio de San Millán de la Cogolla, el joven Domingo se retiró como eremita o ermitaño a un lugar apartado en la zona en la que actualmente se encuentra la población de Santo Domingo de la Calzada (45 km de Logroño). En aquellos tiempos no había nada más que bosques de encinas, y allí permaneció él llevando una vida contemplativa hasta 1039.
A partir de ahí, Domingo emprendió una profunda labor dedicada a mejorar las condiciones de los peregrinos que transitaban esas tierras, y para ello taló bosques y comenzó la construcción de una calzada de piedra que supuso una desviación del camino tradicional por la calzada romana entre Logroño y Burgos, para convertirla a partir de de ese momento en la ruta principal entre Nájera y Redecilla del Camino. Además sustituyó el pequeño puente de madera que existía por otro más seguro de piedra y construyó un hospital y una iglesia para que los peregrinos pudieran meditar y rezar.
Por toda esta labor en mejora de las condiciones de los peregrinos a Santiago fue conocido como Domingo de la Calzada, y en reconocimiento de su esfuerzo su nombre quedó para siempre vinculado al Camino de Santiago.
Juan de Quintanaortuño, conocido como Juan de Ortega (Quintanaortuño, Burgos, 1080 - San Juan de Ortega, 2 de junio de 1163), fue un religioso de España, discípulo del santo Domingo de la Calzada. Su onomástica se celebra el 2 de junio.
Desde 1971 es patrón de los aparejadores y arquitectos técnicos de España.
De joven colaboró con Domingo de la Calzada para abrir caminos que mejorasen el paso por la zona de los peregrinos del camino de Santiago. Hacia 1112, tras el fallecimiento en 1109 de su maestro Domingo, Juan decidió peregrinar a Jerusalén, sufriendo en su regreso un naufragio del que se salvó por su rogativa a San Nicolás de Bari, a quien prometería edificar una capilla en su honor. El lugar donde ubicaría ésta se encontraba en los montes de Oca en una zona conocida como Ortega, procedente del latín Urtica, que significa ortiga o maleza, donde hoy se encuentra la localidad de San Juan de Ortega. Además construiría un albergue para los peregrinos que por allí pasaban. Con el tiempo se le unieron colaboradores en sus labores hospitalarias, con lo que nacería cerca del 1138 el monasterio de San Nicolás, conocido desde principios del siglo XIII como monasterio de San Juan de Ortega.
Según la tradición, se le atribuye la finalización de la calzada entre Nájera y Burgos que había iniciado su maestro y la construcción de los puentes primitivos de Logroño, Nájera, Santo Domingo de la Calzada, Belorado, Cubo de Bureba y Agés.[1]
Cayó enfermo encontrándose en Nájera, pidiendo ser trasladado a su monasterio, donde falleció el 2 de junio de 1163.